Casi siempre iniciamos el nuevo año con un montón de nuevas y buenas intenciones para mejorar nuestra salud y de paso nuestro aspecto. Pero es realmente pasada la Semana Santa, cuando ya vemos más cerca el verano, cuando comienza la obsesión por adelgazar de aquellos que tienen algún kilo de más. Tenemos que advertirte que ya de base el concepto ‘operación bikini’ del titular es erróneo; en realidad se debería llevar una dieta saludable todo el año, permitiéndonos caprichos y excepciones en situaciones puntuales, claro está. Y es que el efecto yoyó de adelgazar y volver a engordar no solo perjudica a la salud sino también a la piel, provocando flacidez y, por ejemplo, el temible doble mentón.
Respecto a las dieta milagro, que prometen una rápida pérdida de peso sin apenas esfuerzo, decirte que deberías descartarlas de plano pues comprometen tu salud. Los planes de choque no resultan efectivos a medio y largo plazo. Además, suelen provocar bastantes efectos adversos en tu día a día pues es muy probable que te duela la cabeza, te notes falto de energía por la tarde o incluso irritable. Por otro lado, suelen estar basados en la ingesta única o primordial de un alimento (alcachofa, piña, proteínas, etc.) cuando la clave está en apostar por una dieta variada que garantice un equilibrio entre los nutrientes.
En líneas generales podemos recomendarte:
- Limitar el consumo de energía procedente de las grasas y azúcares, por ejemplo, no abuses de los bollos industriales, los batidos, los zumos envasados ni de las bebidas azucaradas. El exceso de dulces predispone a la obesidad, la diabetes, la caries y los problemas cardiovasculares.
- Aumentar la ingesta de frutas y verduras, legumbres, cereales integrales y frutos secos.
- Cocinar a la plancha, al vapor, hervido… evitando frituras y salsas altamente calóricas.
Más consejos para lograr una pérdida de peso o bien mantenerte en tu peso ideal: practicar regularmente ejercicio físico, pues en el origen de la obesidad y el sobrepeso se sitúa el desequilibrio energético que ocurre entre las calorías consumidas y las calorías gastadas, y beber entre 1,5 y 3 litros de agua al día, que te hidrate y ayude a depurarte por dentro.
¿Sabías que para garantizar una dieta saludable esta tiene que ser personalizada, pues cada individuo tiene un gasto energético distinto, un metabolismo a un ritmo diferente, unos hábitos de vida únicos? Los genes deciden nuestra dieta perfecta: el 40-70% del sobrepeso viene determinado por nuestra genética. En Onegen Lab, que nos hemos especializado en la ciencia de la piel, ampliamos nuestros conocimientos a la nutrición. Acabamos de lanzar al mercado el test genético de nutrición Dieta, que recomienda qué tipo de dieta debemos seguir y qué alimentos son más recomendables en función del perfil genético. Además, un completo informe nos previene acerca de la predisposición genética a sufrir mayores niveles de sobrepeso y/o obesidad, a tener problemas de control de apetito y ansiedad, sobre si reduciremos peso eficazmente a través de la práctica deportiva, si existe un déficit de vitaminas o tendremos tendencia a que se nos manifieste diabetes de tipo 2 o intolerancia a la lactosa. Tras los resultados obtenidos de una simple muestra de saliva diseñamos una dieta personalizada.
Muy pronto disponible en farmacias y parafarmacias.
